• 01 Feb, 2023
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«Las Condiciones Laborales de los Trabajadores de Seguridad Privada y Serenazgo de las Municipalidades»

En un contexto donde las condiciones laborales minimas y el bienestar de los trabajadores son primordiales, surge una preocupación en torno a las largas jornadas laborales en de seguridad privada y los trabajadores de las entidades publicas como Serenazgo. ¿Es justo que estos trabajadores enfrenten jornadas extenuantes de hasta 12 horas diarias?

La realidad es que el ritmo de trabajo exigido por todas las empresas es insostenible. Los trabajadores se ven obligados a sacrificar su tiempo de descanso y recreación para cumplir con estas jornadas excesivas, dejando poco margen para una vida saludable y equilibrada. ¿Cómo se puede esperar que alguien rinda al máximo de sus capacidades físicas y mentales con un horario que apenas deja tiempo para el descanso?

Es innegable que el trabajo en seguridad privada es fundamental para la sociedad, pero esto no justifica exponer a los trabajadores a condiciones que se asemejan a la esclavitud moderna. Es hora de repensar estas prácticas abusivas y priorizar el bienestar de quienes dedican sus vidas a proteger a los demás.

Es necesario que las autoridades(Congresistas) tomen cartas en el asunto. Se debe promover un cambio normativo que establezca jornadas laborales razonables de 7 horas. Es fundamental que se garanticen condiciones dignas de trabajo, que permitan a estos empleados llevar una vida saludable y equilibrada, sin comprometer su salud física ni emocional.

En este sentido, proponer una reducción en la jornada máxima laboral es esencial. Considerando el agotamiento y la falta de tiempo para el descanso que enfrentan los trabajadores de seguridad privada, se debe abogar por una jornada máxima de 7 horas diarias. Esta medida no solo promovería la salud y el bienestar de los empleados, sino que también contribuiría a una mayor eficiencia laboral y a una mejor calidad de vida en general.

En conclusión, la imposición de jornadas laborales de 12 horas en el sector de seguridad privada es una forma de esclavitud moderna que debe ser erradicada. Es hora de actuar y promover un cambio normativo que proteja los derechos de los trabajadores y promueva condiciones laborales justas y equitativas.